Dios hará justicia y se arrepentirá de lo que hizo


Dios hará justicia y se arrepentirá de lo que hizo



Ante todo reciban un saludo a todos los que vayan a leer mi historia. Soy una mujer de 30 años. Hace dos años tuve un romance con un militar. Nunca me había enamorado, bueno me había enamorado pero no había conocido el amor.

Lo conocí por medio de un periódico y a través de un hermano pasado el tiempo, entablamos una relación. A medida que paso el tiempo decidí no verlo más, ya que mi familia me decía que no me convenía. El me llamaba todos los días en la mañana en la tarde, en la noche… y bueno la verdad pensé que en verdad estaba enamorado de mi.
Pero un día empecé a darme cuenta de que ya no me llamaba como antes y me entro el gusanito de la inseguridad y dejé que el mismo me dijera que estaba pasando, pero nunca me dijo nada y decidí terminar con el. A los días me entere que tenía pareja. Estando conmigo vivía con una chama y me dio tanta, pero tanta rabia que decidí olvidarlo, pero me fue imposible. cada noche que pasaba daba vueltas en mi cama y cada día lo extrañaba y me sentía sola y me di cuenta allí que lo amaba, que me era imposible olvidarlo y lloraba y lloraba mucho por el. Un día una amiga me invito para un centro comercial y acepte y cuando tome el bus me lo encontré. Para mi fue una gran alegría verlo, el corazón se me iba a salir de la emoción. Le di mi número telefónico con la intención de que me llamara y así fue. Me llamó, me dijo que me extrañaba, que todavía me amaba y un sin fin de cosas. Hasta que nos citamos y paso lo que tenia que pasar o lo que queríamos que pasara. Todo fue bonito, yo se que hice mal porque sabia que ya el tenia pareja pero, ay amigo, cuando uno esta enamorado el es amor ciego.

Después de eso me llamaba todos los días, pero aconteció algo que no nos esperábamos. Quede embarazada, decidí no verlo mas por su mujer. No quería entrometerme y dañar su estabilidad con su pareja. Tenia un bebe. Lo llame y le dije que no me llamara mas. Pero creo todo fue inútil porque la mujer se enteró, le revisó el teléfono y se altero. Ella me llamo me insultó, mi familia se metió. A todas estas termino en la jefatura de policía. Ella acuso a mi familia de amenaza yo acompañe a mi familia y el a su mujer y cuando el fiscal entró el me miro y a mi me daba pena todo lo que estaba pasando. Ella como victima y yo como agresora. La fiscal me hizo una serie de preguntas en la cual me pregunto si el bebe que estaba esperando era de el. Yo hice un silencio total y cuando le preguntaron a él dijo “No, ese niño no es mío”. Sentí en ese momento que el mundo se me caía a mis pies y mis lágrimas rodaron, quise morir pero en el cielo hay un dios el cual me dio fuerza.

El se desentendió y le dijo a su mujer que mi hijo no era de el. Pasaron 9 meses y tuve a mi bebé, un hermoso bebe. No le hizo falta nada, gracias a Dios, y a el de vez en cuando me lo encuentro con su mujer. Pero no me importa. Ahora mi amor es mi hijo, mi hijo, mi hijo amado fruto de ese gran sentimiento. A pesar de que no me lo reconoció, creo que algún día Dios hará justicia y el se arrepentirá de lo que me hizo y aquí estoy luchando, estudiando, trabajando. Mi familia me apoya para darle un futuro mejor a mi bebe. Espero que mi historia les guste.

(Anónimo)